OTRA VEZ HA LLEGADO EL OTOÑO
La rueda imparable del tiempo nos ha vuelto a regalar la estampa del Otoño. La estación de los tibios soles amarillos, los días mas cortos y, al anochecer, la suave brisa precursora de cierzos fríos que llegarán sin duda. La poda de árboles en plazas y jardines. Las primeras hojas alfombrando el suelo que pisamos e incluso las primeras castañeras en las esquinas de las calles. Suena Mahler en mis auriculares y me dejo llevar por una melancolía que me arrasa las estancias más íntimas del alma. Es la presencia de un nuevo otoño. En el calendario y en el alma En este tiempo, más que en ningún otro, das cuenta de lo efímero de todo. Especialmente de la vida. Eres consciente que no merece la pena luchar por según que cosas. Que la vida es un relámpago y que pasamos por este mundo de puntillas sin que nada ni nadie pueda evitarlo. La muerte llega cuando tiene que llegar y nunca se adelanta un solo un día. Entonces te harán bellos panegíricos porque, en esta vida, somos demasiado aficion