LAS CLARISAS DE LORCA

Fue de las primeras visiones que tuve aquel trágico amanecer del 12 de mayo (horas después del caos que produjo el Terremoto de Lorca) Clareando el día, y desde el “puente de Eroski” miré hacia el Convento de las Clarisas y vi lo que no me hubiera gustado ver jamás: Su techumbre se había caído y el viejo recinto claustral, iglesia incluida, se había venido al suelo como consecuencia de la virulencia de la naturaleza desatada.

Cuando me permitieron mis obligaciones informativas, a primeras horas del día siguiente 13 de mayo, me acerqué desde Santa Quiteria  (donde estábamos trabajando en el campamento de refugiados) para ver in situ como este lugar emblemático no solo de Lorca sino de toda la Región había quedado tras los seísmos. Imágenes religiosas en la puerta salvadas in extremis. Algun ramo de flores anónimo a los pies de la Virgen. La iglesia conventual con sus techos caídos sobre la nave central. El retablo, rico retablo, destrozado y al descubierto. Las celdas de las hermanas destrozadas. Enseres, muebles….. hasta la cocina (sacrosanto lugar donde las manos de estas religiosas elaboraban los más ricos dulces de España) estaba destrozada.

Todo era ruina y desolación. Las fotografías que ilustran este comentario son mías de aquel triste amanecer pues, al encontrarme la puerta del patio abierta y sin “vigilancia aparente” me colé en su interior con la cámara fotográfica y elaboré para mis archivos un documento gráfico con más de cincuenta instantáneas. Claro que estando en esa labor, y sin darme cuenta, me rodearon miembros de la UME que con caras de pocos amigos, y cumpliendo con su trabajo, me pidieron que me identificara pues podía pasar, sin duda, por un desaprensivo salteador o ladrón. Todo aclarado con mi carnet de Periodista, mi DNI y sobre todo la “visión” de cámaras y objetivos. Eso sí, me pidieron por favor, que saliera del recinto por el precario estado en el que se encontraba en aquel momento y el peligro que suponía para mi vida.

Yo viví allí en aquel sagrado lugar la desolación y el paso salvaje de la muerte. Contemplé, no sin dolor, las ruinas y el caos. Comprobé que todo había quedado arrasado por la fuera telúrica de la tierra. Recordé a aquellas pobres mujeres, mayores, muy mayores, asiladas en casas particulares y con todo perdido. Su vida de contemplación y oración destrozada. Añoré los riquísimos dulces que, la Navidad anterior, alguien muy querido me había regalado de ese convento. Se me vinieron a la mente mil imágenes de estas mujeres con toda su vida dedicada al “Ora et Labora” y que en cuestión de minutos lo habían perdido todo. Como tantas y tantas familias de Lorca. Como miles de lorquinos. Todo ruina, desolación y muerte.

A los pocos días de aquella catástrofe salta la noticia: “Los regantes del Acueducto Tajo Segura donarán, cada uno de ellos, un céntimo por litro del pago del agua para poder acometer la restauración del Convento de las Madres Clarisas de Lorca”  Hermosa iniciativa que fue, en su día, una muestra más de la solidaridad de España, de todos sus pueblos, ciudades y Comunidades, para ayuda de la “Ciudad del Sol” y sus habitantes. Una cosa si tengo clara, dos años después, la solidaridad y la ayuda del pueblo español para la llamada “Mesa Solidaria” ha sido lo más importante que hemos vivido en muchos años. Podría citar mil ejemplos de la movilización general en todos los rincones de la vieja “piel de toro” que demostraron una vez más que, los españoles, somos solidarios y nos ayudamos unos a otros en esos momentos de tristeza y dolor.

Ha llegado el día de la bendición, puesta en valor y “estreno” de las obras de reconstrucción del histórico y emblemático convento lorquino. Y de nuevo, otra vez (y van mil) aparecen en escena los políticos. Me parece muy bien, que conste, que esté mi Presidente, Ramón Luis Valcárcel. Es más, como murciano, quiero que esté mi Presidente. Valcárcel es quien tiene que estar ahí.  Pero ¿Qué pinta en la foto Alberto Fabra? ¿A qué viene a Lorca el Molt Honorable President valenciano? ¿Acaso ha venido antes? ¿Ha “pisado” Lorca destrozada? ¿Se ha preocupado de los lorquinos? ¿Qué méritos tiene Fabra para ponerse en la foto “solidaria”? ¿Por qué Fabra no ha venido antes a Lorca?

Que no me digan que los regantes del “Tajo Segura” también son alicantinos. Eso ya me lo sé y les agradezco su solidaridad. Pero los regantes de la Vega Baja y zona de Benidorm (usuarios del trasvase) son “minoría” en comparación al número de regantes, similares o más que ellos, en toda la provincia de Almería que también se nutre con las aguas del Acueducto e igualmente han dado su “céntimo solidario” ¿Por qué no viene nadie de Andalucía a la entrega del monumento? ¿Por qué no está Griñan junto a Valcárcel y Fabra? ¿Se le ha invitado? ¿Se ha contado con él? ¿No ha querido el Presidente de la Junta? ¿No se le ha dicho nada? Es una ausencia, para mí y bajo mi punto de vista, “sospechosa”.

He vivido estos dos años, desde aquel trágico 11 de mayo, muy concienciado con Lorca y los lorquinos. He visto demasiado en este tiempo. He comprobado que los partidos políticos y sus representantes, todos, han aprovechado en más de una ocasión la tragedia de la ciudad para “salir en la foto” Lorca “vendía” en aquellos días y no lo desaprovecharon aunque, afortunadamente, el pueblo es muy sabio y supo y sabe colocar a cada cual en su sitio. El pueblo, recuerden, nunca se equivoca.

Hoy tenemos otra foto política en el centenario Convento de las Madres Clarisas de Lorca. Una foto en la que, aparte de los murcianos y los regantes, me sobran todos los demás pues, nadie ya, se traga según qué cosas. 

(Imágenes realizadas y cedidas por don Salvador Diaz arquitecto técnico del equipo de restauración)