MI QUERIDA ESPAÑA

 Pido permiso, a la memoria de la inolvidable Cecilia, por utilizar para este artículo el título de aquella canción que, en la década de los setenta, fue todo un himno para aquella generación de españoles que salíamos de una dictadura con las ilusiones, y los miedos, puestos en una España democrática. La canción fue publicada en 1975, en el álbum "Un ramito de Violetas" y no escapó a la censura pues en realidad la letra decía "Esta España viva, esta España muerta" pero, al censor, no le gustó aquello y tuvo que cambiarla por "esta España mía, esta España nuestra". Era una crítica soterrada a la situación social y política de aquel 1975..... y se convirtió en todo un himno para aquella generación de los años setenta y posteriores..... "MI QUERIDA ESPAÑA"

Celebramos hoy, 12 de octubre, la "Fiesta Nacional de España" también conocida como "Día de la Hispanidad" y en tiempos pasados, cuando el escudo nacional era otro, se celebraba "El Día de la Raza". Los lectores que peinan canas, como un servidor, seguro que recuerdan aquella nomenclatura a todas luces desproporcionada desde luego. Sin olvidar, por supuesto, que tal dìa como hoy, hace 531 años, el marinero Juan Rodríguez Bermejo, sevillano de los Molinos, a bordo de la nao "la Pinta" dió el célebre grito de "Tierra" arribando las naves, posteriormente, a la isla de "Guanahaní" bautizandola el almirante Colón como "San Salvador". Sin duda la primera tierra descubierta por los españoles en aquella inolvidable gesta que cambió el mundo tal día como hoy. Pero esta efeméride, casi olvidada en esta fecha, es de importancia capital aunque la "España cobarde y acomplejada" trate de borrarla de la historia dándose el caso curioso que se celebra más en New York que en España. A complejos, desde luego, no nos gana nadie. Podríamos citar mil ejemplos: Covadonga, las Navas de Tolosa, Lepanto, Bailén, el sitio de Baler... pero por aquello de lo "políticamente correcto" esas páginas de nuestra historia, gloriosas páginas, se han borrado de la memoria colectiva como si nos diera vergüenza nuestro pasado glorioso.

Al menos hoy, por ser el día de la Fiesta Nacional, la "roja y gualda" ondea con todo su esplendor en numerosos lugares de nuestro país. Desde la aldea mas pequeña y perdida de la España despoblada, hasta las grandes ciudades y capitales pese a quien pese y le duela a quien le duela. La bandera es un símbolo de uniòn de España. Es la representación de la soberanía, la unidad y la integridad de la patria y, además, atesora los valores superiores expresados en nuestra Constitución. Esa Carta Magna que, algunos desalmados, pretenden cargarse como sea en lugar de intentar entre todas las fuerzas políticas con representación parlamentaria cambiar y modernizar aquellos artículos que, bajo el criterio de sus Señorías, están atrasados y obsoletos. Que seguro los tiene. Pero en lugar de eso, grupos radicales de la izquierda, la menosprecian y la atacan a diario ante la pasividad de un gobierno que tiene que tragar sapos y culebras para mantenerse en el poder al precio que sea. Y con la bandera, con el más sagrado de los símbolos de nuestra España, pasa exactamente lo mismo. Para la izquierda en este país, llevar o lucir, la bandera es ser un "facha" y no hay más. Acusan a la derecha de haberse apropiado de ella, cosa que no voy a discutir, pero no es menos cierto que de un tiempo a esta parte han sido ellos, y solo ellos, los que le han dado de lado y se han avergonzado de utilizarla. Conozco el caso de una militante, con cargo público, en el partido socialista que tenía por costumbre llevar y lucir una pulsera con los colores nacionales y tuvo que soportar todo tipo de presiones de quienes, entonces, dirigían los destinos del socialismo murciano si bien los aguantó de la mejor manera y nunca se quitó la pulsera. La izquierda se retiró hace mucho tiempo de la bandera y la derecha no ha hecho otra cosa que ensalzarla como merece. Aquí solo lucimos la bandera en balcones y ventanas cuando ganamos el Mundial de Fútbol. Viendo otros países y otros comportamientos hacia las banderas, me da y siento envidia. Mucha envidia. 

Se podrían poner mil ejemplos desde luego pero solamente voy a citar alguno de ellos. Francia, fiesta nacional el 14 de julio, la bandera tricolor ondea desde los más humildes balcones a los palacios más nobles. Todo el pueblo unido en torno a su bandera y, por supuesto, a la "Marsellesa" cuya letra aprenden los mas chiquitines antes que saber decir "papá o mamá" y por supuesto que nadie ose tocar, jamás, el símbolo más sagrado: la bandera. Patrimonio de todos y cada uno de los ciudadanos del país vecino. 

El 3 de octubre se celebra el "Día de la unidad alemana" el "Taig der deutschen ein hait" Incluso en aquellos años, de infausta memoria, cuando el muro de la vergüenza separaba la ciudad de Berlín los alemanes de uno y otro lado honraban a su bandera. Eso si en la llamada "República Democrática Alemana", estado dictatorial social comunista dependiente de la URSS y el "padrecito Stalin", tener una bandera alemana te podía costar la vida. No hay mas simbolos que la hoz y el martillo. Pero aún así, los alemanes encerrados a la fuerza tras el muro, guardaban en sus humildes y pobres casas una bandera de aquel país que tanto querían y añoraban. 

 El 23 de abril, día de San Jorge, es la gran fiesta del Reino Unido y ahí está la sagrada "Union Jack" ondeando al viento no solo ese día, sino todos los del año. Bandera formada por las tres cruces de los tres viejos reinos que se unieron, con el paso de los siglos, para crear la realidad actual como la conocemos. Las cruces patronales de Inglaterra, Escocia e Irlanda las de San Jorge, San Andres y San Patricio, por ese orden, forman una bandera que ha ondeado a la par que la española por infinidad de rincones del mundo y que hoy es un símbolo de unión sin distinción de pensamientos o ideologías.

Eso por citar solo algunas del "viejo continente" pues no voy a caer en el tópico, fácil, de compararnos a EEUU donde, la bandera, es lo más sagrado que existe y nadie se atreve a humillarla, ultrajarla, ofenderla o menospreciarla. Seas Demócrata o Republicano. Liberal o conservador. La bandera es intocable y digna de el mayor de los respetos. Claro que tampoco podemos olvidar que los Presidentes juran el cargo sobre la Biblia y que la expresión más utilizada en todos los ámbitos y estamentos es "Dios salve a América"... Aquí se nos ocurre decir "Dios salve a España" y nos puede costar incluso el desprecio social. De la etiqueta de "facha" no te libra ni el mismísimo "Sumo Hacedor" 

Aquí, en esta España nuestra, "Mi querida España" tenemos que ver impotentes cómo se queman banderas a manos de los separatistas catalanes o vascos. Cómo se retiran por la fuerza y con rabia de balcones institucionales donde tienen que ondear porque así se contempla en la Constitución. Como se le pega fuego a manos de los que luego van a ser sostén de un gobierno que solo quiere mantenerse en el poder a consta de lo que sea. En este caso con los votos de los que desprecian a España. Tenemos que ver como en el "templo de la palabra y de la democracia" , en el Congreso de los Diputados, una diputada en la sala de prensa, donde la bandera está colocada por ley en su mástil, la retira antes de comparecer ante los periodistas, sin que nadie haga nada para remediarlo. Insisto, en el Congreso, donde están representadas todas las fuerzas políticas y donde la Constitución es la base de la convivencia. Bandera retirada y nadie de la izquierda protesta. Y luego no quiere el Señor Sánchez Castejón que lo abucheen en todos los actos públicos a los que acude. Que no lo aplaudo ni lo secundo por supuesto, respeto máximo a quien es Presidente del Gobierno, aunque luego el no nos respete a la inmensa mayoría de los ciudadanos. "Despotismo ilustrado. El gobierno del pueblo pero sin el pueblo" 

En fin no me voy a extender más por hoy que ya he abusado lo suficiente del desconocido lector si ha llegado hasta este último párrafo. Como conclusión les confesaré que estoy muy orgulloso de ser español. Que amo y respeto a mi bandera. Que juré, besándola, que la defenderé hasta la última gota de mi sangre. Que la honro siempre y en todo lugar y que si llevarla en la muñeca, en una sencilla pulserita, es un símbolo de ser facha soy el mas facha del mundo porque, para mí, la bandera de España es sagrada. Dios salve a España.

Alberto Castillo Baños

12 de octubre de 2023 día de la Fiesta Nacional de España